Escrito por Federico Romero Díaz
Roma, caput mundi, la ciudad eterna. También el lugar cuya historia no tiene final ¿Nos hemos parado a pensar en la cantidad de mujeres que han vivido en ella a lo largo de su devenir histórico?¿ En las miles de vidas femeninas íntimamente ligadas a los hechos más relevantes que allí han acontecido?Afortunadamente Isabel Barceló si que se ha parado a investigar esta importante faceta de la historia romana, y nos lo ofrece con el mejor de los estilos literarios en Mujeres de Roma. Heroísmo, intrigas y pasiones.
Roma, caput mundi, la ciudad eterna. También el lugar cuya historia no tiene final ¿Nos hemos parado a pensar en la cantidad de mujeres que han vivido en ella a lo largo de su devenir histórico?¿ En las miles de vidas femeninas íntimamente ligadas a los hechos más relevantes que allí han acontecido?Afortunadamente Isabel Barceló si que se ha parado a investigar esta importante faceta de la historia romana, y nos lo ofrece con el mejor de los estilos literarios en Mujeres de Roma. Heroísmo, intrigas y pasiones.
"El Frigidarium". L. Alma Tadema. |
La autora
Es Licenciada en Filosofía y letras por la Universidad de Valencia y tiene una larga trayectoria literaria jalonada por obras como Las flechas de Eros, La ira de Medea, La fundación de Roma, Orfeo desciende a los infiernos, Perseo y la mirada de Medusa, La muchacha de Cátulo, Dido, Reina de Cartago, y alguna incluso de literatura juvenil como Tope secreto. El secuestro de la luna.
Es también una conocida y prestigiosa divulgadora histórica autora de numerosos artículos, conferenciante, y autora un blog muy seguido, Mujeres de Roma.
Su experiencia como residente en Roma en la Real Academia de España le permitió documentarse para la elaboración de la narración que estamos reseñando.
La obra
Deberíamos empezar aclarando que no estamos ante una novela, ni ante un ensayo histórico, ni frente a una guía de la geografía y la historia romana, aunque en realidad, reúne elementos de los tres cosas a la vez.
Tres son los factores que determinan a Mujeres de Roma: una enorme y exquisita carga literaria; un rigor histórico difícil de encontrar en obras con ese amor hacia lo narrativo, y por último el uso de la geografía de la ciudad y de la figura femenina como ejes vertebradores de sus páginas.
La autora utiliza el entramado urbano de la ciudad y sus colinas para saltar de un siglo a otro, para pasar de la historia de una mujer a la de otra muy distinta en sus 18 capítulos, siendo la narración de la brava Anita Garibaldi, en el siglo XIX, en pleno proceso de reunificación italiana, la más cercana a nuestro tiempo.
De verdad que no pensé que la ya tan usada narración de la muerte de César volvería a hacerme ser testigo en primera persona del evento. Tú lo has conseguido. Enhorabuena.
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