En la medida de lo posible y a lo largo de toda esta reseña, voy a tratar de evitar el uso de la palabra "bizantino", ya que ese es un epíteto creado con mucha posterioridad a la caída de Constantinopla. Los ciudadanos del Imperio Romano de Oriente jamás usaron ese epíteto para llamarse así mismos. Ellos se referían a si mismos como romanos, que por otra parte es lo que eran.
Con "Breve historia de Bizancio estamos ante un ensayo que presenta la virtud de presentar de manera amena y divertida, pero sin perder el rigor necesario en toda labor de divulgación, una visión general de la evolución política y militar, social, económica, artística e intelectual de ese Imperio Romano de Oriente que sobrevivió casi mil años más, a su homólogo de Occidente, protagonizando brillantes momentos que han hecho de nuestro mundo lo que es en la actualidad.
Asedio turco a Constantinopla. |
LA OBRA
Una de las virtudes de la obra es que nos aleja del típico concepto de decadencia que se asocia al Imperio Romano de Oriente. Es una idea totalmente falsa, ya que El Imperio con capital en Constantinopla estuvo sometido a todo tipo de vaivenes a lo largo de casi mil años. Hubo momentos de una brillantez enorme durante el siglo VI, con Justiniano, que asistido por excelentes generales como Narsés o Belisario, llevó a buen fin su política de Renovatio Imperium y se reconquistaron una gran parte de los territorios perdidos por el Imperio de Occidente durante su lento derrumbe. Los estandartes de Roma volvieron a ondear en el Norte de África, donde los vándalos fueron barridos para siempre de la historia; en Italia donde desplazaron primero a ostrogodos y después a los lombardos; en Hispania donde hicieron frente durante más de medio siglo a los visigodos. Bajo la hegemonía de Constantinopla el Mediterráneo volvió a ser un mar romano, el comercio se reactivó y la economía floreció. De todo esto y de los gobiernos anteriores de Teodosio y de Constantino se habla en los primeros capítulos. Es en estos momentos cuando Constantinopla se crea, se embellece y se configura como el principal núcleo urbano de su época. La pujanza económica de Oriente le permite sobrevivir a la terrible crisis del siglo V. Como hemos mencionado estos romanos de Oriente supieron hacer frente a vándalos, ostrogodos y visigodos, pero también a persas, eslavos y otomanos. De todo esto se nos habla en los tres primeros capítulos de los nueve de los que consta el libro.
Constantinopla jugó un papel clave como reservorio de la cultura grecorromana en la que, a día de hoy en Europa y en Occidente en general, podemos reconocernos en un grado muy elevado. En los capítulos que van del IV al VI se habla de "crisis y de continuidad" es en estos momentos, ya finalizada la Tardo-antigüedad cuando comienza la preponderancia de lo griego sobre lo romano que no obstante nunca llegará a desaparecer. Es el momento en el que aparece un terrible enemigo, el Islam, al que tras perder Egipto, Siria y Palestina, frenará a finales del siglo VII en Asia Menor.
En el capítulo VII se trata de los conflictos de Constantinopla con Occidente. Llega el fin de la presencia bizantina en Italia y los cruzados hacen su aparición en Oriente. Con Alejo I Comneno (1081-1118), se frena el declive y se experimenta un resurgir económico gracias al comercio con Venecia y Génova, aunque la relación con estas potencias comerciales, será difícil y provocará múltiples conflictos y revueltas internas.
En el capítulo VIII asistimos desolados al saqueo de Constantinopla a manos de los cruzados occidentales, la capital no volverá nunca a su antigua esplendor. El Imperio se fragmentará para volver a unirse bajo Miguel VIII Paleólogo. En el último capítulo asistimos al avance turco por los Balcanes y el territorio griego. Vemos como poco a poco el gran Imperio Romano de Oriente se ve reducido al territorio de su capital, Constantinopla, que finalmente caerá en 1453 a manos de los turcos.
EL AUTOR
David Hernández de la Fuente es doctor en Historia Social de la Antigüedad, especialista en Historia Cultural de la Antigüedad, es actualmente profesor de Historia Antigua de la UNED. Es autor, coautor o editor de más de una veintena de libros, artículos, etc. Ha recibido además numerosos premios relacionados con su labor y participa en numerosos grupos de investigación relacionados con la Antigüedad.
En conclusión, estamos ante una excelente obra que puede servirnos de puerta a un conocimiento verdaderamente profundo del Imperio Romano de Oriente, de su brillante cultura, a su rico legado cultural como se dice en su prologo de la obra" pretende más bien ser una primera aproximación a la historia bizantina y a su rico legado cultural, un paisaje histórico de una comunidad política y espiritual irrepetible que ha dejado una huella profunda en la historia de las ideas en Occidente".
Es una obra amena. Pero para una introducción algo más seria si uno quiere profundizar y como comienzo al interminable viaje bibliográfico a Bizancio---> "Historia de Bizancio" de Emilio Cabrera (Ariel, 1998, 2012).
ResponderEliminar